El abogado Edgar Fidias María Taboada Insfrán despertó en la mañana del martes, 25 de octubre, sin ser todavía ministro de Justicia. Su juramento tomaría horas después, junto al presidente Mario Abdo Benítez. Al llegar la noche, el letrado fue a dormir sin su flamante cargo. Lo habían destituido desde el Ejecutivo, el mismo poder que le tomó juramento ese mismo día. ¿Qué pasó?
En la misma nada quedó su primer discurso inicial, en el que dijo que asumió el cargo “para continuar trabajando con honestidad, rigor y transparencia como lo viene haciendo desde su desempeño como viceministro de Justicia en los últimos dos años y medio”. Refirió, además, sobre las medidas que implementaría para combatir la influencia del crimen organizado en los penales y las vías a proseguir en defensa de los derechos humanos.
En su primer (y último) día de trabajo en su nuevo puesto, Taboada no pudo con la presión de Carmen Villalba, ex líder del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) y hermana del fallecido Osvaldo Villalba, abatido en un enfrentamiento con la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC).
Abdo explicó en conferencia de prensa que en la mañana de este domingo en el marco de la Operación Zeus y tras un año de trabajo de inteligencia por parte del Comando de Operaciones de Defensa Interna (CODI) de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) se logró abatir a tres integrantes del EPP.
«El primero es la cabeza de este grupo terrorista, ya tenemos confirmada la identidad, el cabecilla Osvaldo Villalba, el segundo es Luciano Arguello cuya identidad se está por confirmar y una tercera persona con la identidad a confirmar», afirmó. Se trataba así de uno de los mayores logros de su gobierno. Poco sabía Marito que este hecho tomaría una controversia tremenda por parte de su próxima designación en el Ministerio de Justicia.
Carmen Villalba, ex líder del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), en conjunto con sus familiares, solicitaron meter el féretro del guerrillero a la cárcel del Buen Pastor por cinco minutos, antes de su entierro en la Recoleta. Querían que la reclusa pueda despedirse de su hermano.
En un primer intento, el acceso a la cárcel fue denegado, atendiendo que no se dio ningún pedido formal y tampoco existía la dotación de agentes policiales en el lugar para permitir el acceso, según informaron desde el Ministerio de Justicia.
El hecho causó una feroz polémica y abrió el debate: ¿Puede una presidiaria y ex guerrillera exigir algo al Gobierno? ¿Cabe siquiera un pedido así de parte de alguien que causó horror a tantos compatriotas? Y, sin embargo, el ministro de Justicia cedió ante la hermana del abatido líder del EPP.
Finalmente, los restos del guerrillero permanecieron por cinco minutos dentro del reclusorio. Se hizo caso al pedido de Carmen Villalba, quien exigió a las autoridades que los restos de su hermano fuesen llevados hasta el reclusorio, rodeado por un fuerte dispositivo de seguridad.
Los familiares de Osvaldo y Carmen Villalba llegaron hasta el Buen Pastor, sobre la avenida Mariscal López, sin realizar trámites previos, pero ante la presión, el Ministerio de Justicia autorizó el ingreso del ataúd. Según trascendió, la autorización se dio ante el temor de que se produjera algún amotinamiento dentro del reclusorio.
Esto causó una lluvia de críticas hacia el gobierno, lo que le costó el puesto al flamante ministro de Justicia.
Una presidiaria derribó al Ministro de Justicia del Paraguay
El jefe de Gabinete Civil de la Presidencia, Hernan Huttemann, confirmó en las últimas horas del martes la destitución del ministro de Justicia, Edgar Taboada, tras el ingreso del féretro de Osvaldo Villalba al Centro Penitenciario para mujeres «Casa del Buen Pastor».
Huttemann afirmó que el ingreso del féretro a un centro penitenciario es una situación no prevista en la Ley, y tras el análisis correspondiente se tomó la determinación de destituir a Taboada. Además, fue destituida la directora de la penitenciaría, Marian Vázquez.
A raíz de todo el escándalo, desde el Gobierno confirmaron que se realizará un sumario a la presidiaria Carmen Villalba, además de una investigación al respecto a cargo de Asuntos Internos.
Daniel Benítez, actual encargado de despacho del Ministerio de Justicia, manifestó que había comunicado al ahora destituido Édgar Taboada que no correspondía el ingreso del féretro a la sede penitenciaria y que le pasaron “malas informaciones” con respecto a amenazas de motines.
Los familiares de Óscar Denis, Edelio Morínigo y Félix Urbieta, secuestrados por el EPP y el Ejército de Mariscal López, criticaron duramente a las autoridades por el ingreso del ataúd a la penitenciaría de mujeres del Buen Pastor.
