La mujer que denunció el hecho, cuyo nombre omitiremos como medida de protección a la víctima, afirma que no pensó que el ginecólogo que la atendió durante tres años, le faltaría el respeto y abusaría sexualmente de ella durante una consulta. Ella cuenta que el lunes 16 de noviembre fue al Sanatorio Internacional, para hacerse el estudio del Papanicolau con el Dr. Cristian Sosa.
“(Él) Hizo lo correspondiente al estudio con el instrumento adecuado y me explicó lo que veía. Cuando sacó el instrumento, intenté levantarme creyendo que ya había terminado y me pidió que me quede en mi lugar porque según él no había terminado”, cuenta.
Dice que en ese momento él empezó a excederse con comentarios y preguntas sobre la vida sexual de ella, quien estaba en el consultorio sin ropa y sólo vestida con una bata. Luego le pidió que se quite la bata diciendo que le examinaría el pecho como prevención del cáncer de mama.
Ella se quitó la bata con confianza en el profesional, sin embargo los comentarios sobre su cuerpo continuaron hasta que incluso se acercó y le succionó uno de sus pechos. Ella lo empujó y empezó un forcejeo.
“Trataba de besarme a toda costa sometiendo su fuerza bruta contra mí, y como no podía salir contra su fuerza, amagué que me entregaba y en ese momento que dejó de ejercer su fuerza contra mí, consigo salir de él y me encierro en el baño para vestirme. Como estaba en estado de shock no pude agarrar mi celular, que por indicaciones expresas de él, me había solicitado que dejara sobre su escritorio incluyendo mi billetera”, cuenta ella.
Se vistió y salió con miedo del vestuario. Logró recuperar su teléfono y su billetera. Él la esperaba en el escritorio y cuando ella ya salía, la estiró nuevamente e intentó besarla. Ella logró zafar y él se despidió desde la puerta diciéndole que la esperaba en 8 días.
El valor de denunciar
Ella cuenta que ese lunes salió prácticamente shockeada del sanatorio. Su pareja notó que estaba alterada y le preguntó qué pasaba. Ella recién pudo contar lo que pasó cuando vio relatos similares a lo que vivió en redes sociales. Contó su experiencia a su hermana y amigas, quienes la animaron a denunciar ante la Fiscalía.
“Recibí testimonios de otras mujeres que también fueron víctimas de este degenerado, incluyendo acosos por redes sociales con fotos de su miembro sacadas dentro de su consultorio con su bata. Todo esto me motivó más a no ceder e hice la denuncia por las vías correspondientes. Les animo chicas que no se dejen intimidar, que por ser doctor, por ser gente acaudalada que le puede tratar de menos”, dice ella.
La detención y el miedo a la impunidad
La denuncia fue presentada por la paciente ante el Ministerio Público y el fiscal Sergio Irán Villalba de la Unidad Penal Nro. 11, libró orden de captura contra el doctor Cristian Sosa el viernes último.
Luego de un seguimiento al médico, quien no salió por varios días del Sanatorio Internacional, la Policía lo detuvo este martes a las 07:35 en la vía pública, en la calle Las tórtolas casi Los lapachos, cerca del hospital.
Una vez detenido fue llevado para una inspección médica. Fue convocado para prestar declaración indagatoria en la Fiscalía y ahora se espera la decisión del Juzgado en cuanto a la prisión preventiva.
Familiares y amistades de la víctima se manifestaron frente a la Fiscalía y el Juzgado Penal pidiendo prisión para el médico. Temen que debido a su poder económico, considerando que es uno de los propietarios del Sanatorio Internacional, logre su libertad ambulatoria y hasta su sobreseimiento. Piden además que su registro médico sea anulado, para que ninguna otra mujer pase por una violencia similar.