Esta destacada participación fue posible gracias al apoyo de ITAIPÚ Binacional, en colaboración con la Organización Multidisciplinaria de Apoyo a Profesores y Alumnos (OMAPA). Ambas organizaciones, a través de la Asesoría de Responsabilidad Social de ITAIPU, se encargan de entrenar a los futuros matemáticos del país para enfrentar retos de esta magnitud.
María José Ortiz Benítez, oriunda de Asunción, brilló al resolver y justificar de manera perfecta uno de los problemas presentados en la competencia. Además de Ortiz, el equipo paraguayo estuvo conformado por Tobías Santiago Valdez Caballero (18), de Ñemby; Mía Tatiana Fleitas González (15), de Asunción; y Ariel Alejandro Insaurralde Aldana (18), de Ciudad del Este. Carmen Sánchez lideró la delegación, mientras que Edgar Elizeche actuó como vice líder.
Un reconocimiento esperanzador
Los integrantes del equipo expresaron su gratitud y alegría por haber tenido la oportunidad de representar a Paraguay en un escenario tan competitivo. “Este reconocimiento nos motiva para seguir adelante, mejorando nuestras habilidades matemáticas”, afirmaron.
Sobre la Olimpiada
La Olimpiada Iberoamericana de Matemáticas es un evento anual que congrega a jóvenes talentos menores de 18 años de más de 20 países iberoamericanos. La competencia consta de dos pruebas escritas de cuatro horas cada una, que se realizan en días consecutivos.
OMAPA no solo actúa como impulsora de talentos para competencias internacionales, sino que también organiza la Olimpiada Nacional Juvenil de Matemática en Paraguay. Los estudiantes más destacados son luego invitados a participar en el Programa de Iniciación Científica con énfasis en Matemática para Jóvenes Talentos, donde se seleccionan a los representantes para certámenes internacionales.
La presencia paraguaya en este tipo de eventos internacionales es posible gracias a la colaboración conjunta de ITAIPÚ Binacional y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT).
Con esta actuación, los jóvenes paraguayos no solo representaron dignamente a su país, sino que también demostraron que el futuro de las ciencias exactas en Paraguay está en buenas manos.