Desde este fin de semana se prevé que los caudales del río Paraná y arroyos afluentes como el Acaraymi, sigan creciendo. El Ing. Giovani Gomes, Gerente de División de Estudios Hidrológicos de Itaipú Binacional, explicó cómo vienen haciendo el monitoreo de las condiciones hidrometeorológicas.
“Tenemos los pronósticos a disposición, en su mayoría de instituciones meteorológicas nacionales, del Brasil e internacionales. Evaluamos dentro de la División y a partir de eso se calcula la cantidad de agua que van a generar las precipitaciones”, comentó.
Agregó que: “Desde la mitad de enero se empezó a abrir las compuertas del vertedero de Itaipú para evacuar el agua, que ya que los niveles sobrepasaron los límites y ya no se podían almacenar en el embalse”.
En enero todavía no eran caudales que generaban inundaciones, pero desde el fin de semana pasado accedieron a los pronósticos que tendrían impacto en las represas brasileñas que operan aguas arriba de Itaipú y que también empezaron a aumentar sus descargas.
La cota del río Paraná a la fecha, medida en la Estación Hidrométrica del Puente de la Amistad, es de 108,92 metros sobre el nivel del mar (msnm), con tendencia a subir, conforme a los datos proporcionados por la División de Estudios Hidrológicos y Energéticos de la Superintendencia de Operación de ITAIPU. Este valor actual corresponde al estado de primeras inundaciones en función a la cota del Paraná aguas abajo de la Central Hidroeléctrica, afectando infraestructuras e instalaciones en la zona comprometida, en este caso barrio San Rafael.
Para la zona de Alto Paraná se anuncian lluvias para toda la próxima semana. Ante esta situación, Itaipú reactivó su Comisión Especial de Crecidas (CEC), para monitorear la situación hidrológica del río Paraná, aguas abajo de la usina.
Esta comisión fue creada hace unos años e instalada en la Superintendencia de Operaciones de la Dirección Técnica. Está integrada por Responsabilidad Social, la Dirección de Coordinación, Seguridad empresarial y Comunicación social.
Asistencia a familias damnificadas
Itaipú, a través de su Asesoría de Responsabilidad Social puso en marcha desde este viernes, el plan de asistencia a las familias damnificadas residentes en el barrio San Rafael de Ciudad del Este, Alto Paraná. Unas 75 viviendas podrían verse afectadas por las condiciones hidrológicas de constantes lluvias.
El operativo de asistencia arrancó en la mañana de este viernes a cargo de un equipo de trabajo coordinado por la Asesoría de Responsabilidad Social de la Binacional. La primera acción consistió en el relevamiento de la cantidad de viviendas afectadas en esta etapa inicial de la inundación y las necesidades puntuales, para proceder a la movilización de los afectados hacia los albergues, con móviles y personal proporcionado por la Entidad.
Gerardo Soria, asesor de Responsabilidad Social de la Entidad, indicó que, a través del censo de las familias damnificadas, que irá actualizando el equipo de Responsabilidad Social, se podrá identificar los requerimientos urgentes, entre ellos la dotación de vehículos y estibadores, provisión de insumos y materiales de construcción a ser utilizados en los campamentos, víveres, entre otros.
Asimismo, resaltó que se buscará establecer canales de comunicación efectivos para mantener el contacto con los afectados. La idea es informarles acerca de los niveles de crecida y las acciones a emprender, conforme a los reportes hidrológicos y meteorológicos proporcionados por las áreas técnicas de la Binacional.
La Municipalidad de Ciudad del Este también asiste a las familias damnificadas, a través de su Dirección de Desarrollo Social. El equipo de contingencia municipal facilitó las logísticas de traslado y reubicación para 30 familias del barrio San Rafael, a quienes se proveerá desayuno y merienda especialmente a madres y niños. El equipo comunal instaló refugios con toldos y carpas, con baños químicos.
A través de la División de Banco de Alimentos y la Planta Procesadora de Alimentos de la Municipalidad, se prevé la organización de ollas populares para ayudar a las familias afectadas, quienes estarán por unos 15 días en estas condiciones, según las previsiones.