La Marcha Mundial de la Marihuana es un evento que se realiza desde 1999 de forma simultánea y autónoma, el primer sábado de mayo de cada año en ciudades de todo el mundo. El objetivo es realizar un reclamo común que evidencie la cantidad de personas que exigen normalizar el uso de la planta de cannabis, además acabar con la criminalización y persecución de sus usuarios y cultivadores.
De acuerdo a las realidades propias de cada país, en las distintas manifestaciones se reclama desde el cese de las detenciones, los procesos penales o las multas a usuarios y cultivadores, hasta el reconocimiento de los usos medicinales e industriales del cannabis y la regulación del acceso al mismo.
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En el caso de Paraguay, una de las principales organizaciones convocantes a la marcha es Mamá Cultiva, una asociación sin fines de lucro que agrupa a madres de niños con epilepsia refractaria, cáncer y otras patologías que no han encontrado una mejoría en la medicina tradicional. Desde la organización, buscan impulsar el uso de cannabis bajo todos aquellos formatos considerados medicinales (resina, aceite, macerados, tinturas, pomadas, entre otros) atendiendo a los buenos resultados que esta terapia ha logrado en sus experiencias.
“Exigimos la inmediata implementación de la Ley 6007, promulgada en 2017. A 5 años no tenemos una implementación cabal de la ley, no se cumple el cultivo a nivel nacional para uso medicinal, no se hace investigación, ni tampoco se hace una distribución real de la medicina. Lo que se tiene es que de las 12 licencias habilitadas para la producción y habilitación, sólo 2 laboratorios trabajan y no producen a nivel nacional”, explicó Cynthia Farina, presidenta de Mamá Cultiva.
Afirmó que actualmente el acceso a la medicina es limitado y restricto. “Queremos que se cumpla el Artículo 2, inciso C de la Ley 6007 que establece que el Estado debe garantizar el acceso gratuito a aquel que requiera cannabis medicinal y que esté inscripto en el registro”, comentó.
Sin embargo, el registro de usuarios de cannabis recién se habilitó en 2021, con un formulario para la inscripción de los pacientes y profesionales médicos que deben acompañar el tratamiento.
“No hay una difusión real, ni campañas de promoción. Hay sólo 10 médicos inscriptos y 90 personas como usuarias. El registro tiene muchas trabas, limitan a ciertas patologías, sólo aceptan epilepsia y ecleriosis”, expresó Farina.
Sin embargo, en la experiencia de las madres asociadas a Mamá Cultiva, el uso de cannabis en diversas formas de tratamiento les ayudó a enfrentar y sobrellevar diversas enfermedades en sus hijos/as y familiares.
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“Existe evidencia registrada a nivel internacional sobre las propiedades del cannabis en la medicina, pero en Paraguay no generan evidencia a nivel nacional. Y esto tiene que ver tabúes y la criminalización de la marihuana. Hay un estigma, prejuicios, intereses por detrás en cuanto a la producción, al usufructo y la ganancia en cuanto a esto”, indicó la presidenta de la organización.
Y finalizó: “Como país somos el segundo mayor productor de cannabis pero lastimosamente esta direccionado al narcotráfico y no al uso medicinal o producción industrial”.
Otras organizaciones adheridas a la Marcha Mundial de la Marihuana en Paraguay son: la Asociación Paraguaya de personas con Artritis Reumatoidea y Afines- APPARA, Asociación Paraguaya de Padres y/o Tutores de Personas con T.E.A., Observatorio Paraguayo de Cannabis y la Cámara de Cáñamo Industrial del Paraguay (CCIP).
La Marcha Mundial de la Marihuana – Paraguay será este sábado y tendrá como punto de encuentro la Escalinata Antequera a las 15:30. El recorrido finalizará en la Plaza Italia donde se dará lectura a un manifiesto y se presentarán varios grupos musicales.