Primero fueron rumores, que luego fueron tomando cuerpo hasta llegar a convertirse en una realidad que llama la atención en el mundo de la producción audiovisual y del entretenimiento. Este martes se hizo oficial la compra de Metro-Goldwyn-Mayer (MGM) por parte de Amazon, el gigante de las compras en línea (que también está bien presente en el área del entretenimiento con su servicio de streaming Amazon Prime Video y Twitch).
Nada más y nada menos que 8.450 millones de dólares americanos, aproximadamente Gs. 57.037.500.000 al cambio, le dieron a Amazon una extensa biblioteca de películas y programas de televisión que puede usar para completar sus arcas de contenido de Prime Video. MGM tiene un catálogo con más de 4.000 películas y 17.000 programas de televisión.
La parte más atractiva del acuerdo es la “propiedad intelectual”, el objeto de deseo de cualquier compañía que pone un pie en Hollywood. Apple llegó a negociar hace unos meses la compra del estudio con el propósito de ampliar su pequeño catálogo de cine y televisión para su servicio de streaming Apple TV+. Las conversaciones no llegaron a buen puerto y, finalmente, la compañía fundada por Jeff Bezos puede presumir de la operación.
MGM era uno de los pocos grandes estudios que seguía sin estar presente en catálogos de streaming de películas y series. De esta forma, Netflix, HBO, Amazon y Disney van adueñándose de todas las productoras, mientras que la estrategia de Apple TV+ está enfocada en ofrecer su propio contenido sin incluir el de terceros.
La clave de la compra: Bond, James Bond
“El valor financiero real detrás de este acuerdo es el tesoro de la propiedad intelectual en el catálogo profundo que planeamos reinventar y desarrollar junto con el talentoso equipo de MGM. Es muy emocionante y brinda muchas oportunidades para contar historias de alta calidad», expresó Mike Hopkins, quien dirige Prime Video y Amazon Studios.
El estudio del león rugiendo al incio de muchas grandes obras cinematográficas no iba por buen camino en los últimos años. En 2010, Metro-Goldwyn-Mayer se declaraba en quiebra, presentando la declaración de insolvencia ante un Tribunal de Manhattan. Bajo la protección de la Ley de Quiebras estadounidense, pudo liberarse de sus pesadas deudas, que ascendían a alrededor de 4.000 millones de dólares.
Pero, además de deudas, MGM era dueña de interesantes títulos. Por solo citar unos cuantos: Lo que el viento se llevó (1939), Cantando bajo la lluvia (1952), 2001: Una odisea del espacio (1968), El mago de Oz (1939) o Ben-Hur (1959). Pero la más llamativa y que guarda un tremendo potencial por delante actualmente es la saga del agente secreto británico más famoso del mundo: James Bond.
La marca Bond, que también es controlada Eon Productions, es también una historia de éxito de taquilla en los cines de todo el mundo, acumulando miles de millones de dólares en los últimos 60 años. Las películas y su personaje principal ya forman parte de la cultura pop, y si Amazon Prime Video es el nuevo hogar de James Bond, esa es una propuesta atractiva para los consumidores potenciales.
Todo eso sin olvidar que la próxima cinta del agente 007 está aguardando su momento para salir en cines, ya que ha sido retrasada un par de veces por la pandemia del COVID-19. Si todo sale bien, verá la luz en octubre de este año.
Gigante de internet no, lo siguiente
Quizás la razón más básica pero a la vez entendible de la compra de MGM por parte de Amazon es simplemente porque puede.
En más de 20 años de historia ha ido derribando marcas, inversores que decían que iría a la quiebra (¿Compras en internet? ¡Una locura!) y rompiendo récords hasta llegar a lo que es hoy, la tercera empresa más valiosa del mundo, solo por detrás de Apple y Saudi Aramco; dejando atrás por el camino a empresas de la talla de Microsoft, Alphabet (Google) entre otros.
Detrás de la empresa está el hombre que hizo posible el sueño, Jeff Bezos, quien días atrás fue superado por un empresario francés como la persona más rica del mundo, y queda en una segunda posición. ¿Su fortuna? Según la revista Forbes se acerca a los casi US $187.000 millones de dólares.
La clave de la fortuna es la inversión en sus distintas empresas, de las cuales se citan Twitch (plataforma líder en streamings), The Washington Post (uno de los medios de comunicación más importantes de E.E.U.U.), Blue Origin (empresa de transporte aeroespacial), AirBnb (plataforma dedicada a la oferta y demanda de alojamientos particulares), entre otras muchas, muchas empresas.
A pesar de todo, el fundador de Amazon anunció a su vez que renunciará pronto como CEO de la compañía el próximo 5 de julio (fecha especial para él ya que en la misma, pero 27 años atrás, fue cuando fundó la empresa). Igualmente, esto no significa su alejamiento total del gigante, ya que quedará como presidente ejecutivo de Amazon, y se centrará en nuevos productos e iniciativas, además de enfocarse en sus otras empresas ya citadas anteriormente (como Blue Origin y The Washington Post).