Para abordar este tema, debemos posicionarnos y saber que al hablar de Alzheimer, hablamos de una enfermedad neurodegenerativa, progresiva, irreversible que comienza con la pĂ©rdida leve de la memoria. Involucra a las partes del cerebro que controlan el pensamiento, la memoria y el lenguaje, pudiendo afectar la capacidad de una persona para realizar las actividades de la vida diaria. Quien descubriĂł, fue el psiquiatra Alois Alzheimer a inicios del siglo XX. Hasta el dĂa de hoy es incurable.
SegĂşn la OrganizaciĂłn Internacional Especializada en Salud PĂşblica de las AmĂ©ricas (OPS), en el año 2015 se expuso la cantidad creciente de personas con Alzheimer y lĂderes de la salud de las AmĂ©ricas se comprometieron a adoptar medidas para mitigar la mencionada enfermedad. Cabe destacar, que está considerada como epidemia del siglo XXI, no tiene cura, pero si se pueden realizar rutinas y actividades para retrasar el deterioro.
Los mismos informes también plantean que para el año 2030 en América Latina y el Caribe se dará el aumento más acelerado, ya que pasará de 3,4 millones de personas en 2010 a 7,6 millones en 2030, cifra que supera la proyección de 7,1 millones de personas con este trastorno en los Estados Unidos y Canadá.
Dicha enfermedad afecta a todos los grupos sociales y no hace distinción de sexo, de grupo étnico ni lugar geográfico. En Paraguay no se cuenta con asociaciones, grupos de apoyo o centro del Alzheimer. Sin embargo, desde el 2003 se fundó Alzheimer Iberoamérica (AIB), para convertirse en portavoz y defensora de las Asociaciones de Alzheimer de habla hispana y portuguesa, institución sin fines de lucro en donde Paraguay brilla por su ausencia.
Un gesto de amor y los cuidados a personas que viven con Alzheimer
En un reciente caso, en una entrevista con The Mirror, el vocalista de la banda de punk Sex Pistols, John Lydon (Johnny Rotten) decidió decir adiós a la música para cuidar de su amada esposa Nora Forster, quien padece Alzhéimer.
En este proceso Lydon define a la enfermedad como un proceso perverso, debilitante y lento, pero que están pasando juntos. Él está consciente que la enfermedad es incurable, sin embargo, se alegra al decir que su esposa no lo olvida, actualmente la pareja vive en Estados Unidos y además tienen otras propiedades, por lo que tienen la solvencia necesaria para enfrentar juntos la enfermedad.
Quizás en tu entorno más cercano conoces a alguna persona que ha tratado con pacientes de esta enfermedad. Los servicios públicos de salud mental en Paraguay y por lo tanto tratamientos para el Alzhéimer, tienen una financiación muy insuficiente y se ha detectado que algunos pacientes tienen menos de 60 años. Esta es una enfermedad que puede afectar a toda la familia, que causa depresión, ansiedad y agotamiento en los cuidadores y seres queridos, puesto que es una enfermedad que se da de forma gradual.
Los deterioros en a la persona lo padece son: pĂ©rdida de memoria a corto plazo, pĂ©rdida de memoria a largo plazo, alteraciĂłn de capacidad de razonamiento, pĂ©rdida de vocabulario o incomprensiĂłn ante palabras comunes (afasia), descontrol sobre los propios mĂşsculos (apraxia), pĂ©rdida de capacidad espacial, cambios de carácter entre estos se pueden ver irritabilidad, confusiĂłn, apatĂa, decaimiento, falta de iniciativa y espontaneidad.
Pero existen buenos hábitos, que pueden mejorar la calidad de vida de los pacientes. El ComitĂ© de MĂ©dicos por una Medicina Responsable publicĂł un estudio en donde se presentan siete hábitos que podrĂan reducir entre un 70% y un 80%, la presencia del Alzheimer, y son los siguientes:
- Reducir el consumo de grasas saturadas.
- Hacer de las verduras, frutas, legumbres la base de la pirámide alimenticia.
- Consumir alimentos con vitamina E.
- Consumir alimentos con vitamina B12.
- Evitar los multivitamĂnicos con hierro y cobre (a menos que lo indique un mĂ©dico).
- Evitar cocinar en ollas y sartenes de aluminio.
La actividad fĂsica es clave y acciĂłn preventiva recomendada. Los beneficios más resaltantes de la práctica regular de ejercicios son:
- Disminuye la formaciĂłn de placas neurĂticas por acumulaciĂłn de proteĂnas anormales como la amiloide y Tau que frenan una buena funciĂłn neuronal.
- Incrementa el flujo sanguĂneo cerebral, garantizando un aporte adecuado de oxĂgeno al cerebro.
- Mejora los niveles de glucosa en sangre y la utilizaciĂłn de la insulina por las neuronas.
- Aumenta la producciĂłn de neurotransmisores como la acetilcolina y otro conocido como Factor neurotrĂłpico derivado del cerebro (FNDC), clave para nuevos aprendizajes y mejor funciĂłn cognitiva.
- Reduce el nivel de marcadores proinflamatorios generados por el avance de la edad y mejora en la resoluciĂłn de tareas cognitivas, por ejemplo: calcular, planificar, memorizar y atender.
En este proceso estamos todos, nadie puede garantizar que no le va a tocar. Si bien la ciencia avanzó bastante, aún quedan peldaños por subir en el camino a la cura… ¡pero llegará!