Como una medida operativa, la Central Hidroeléctrica ITAIPU tiene previsto mantener abierto su vertedero con un caudal mínimo de agua, con el objeto de regular el embalse. Además de la función técnica de producción de la represa, la liberación de agua también constituye un atractivo para turistas.
Según el informe proporcionado por la Superintendencia de Operación de la Dirección Técnica de ITAIPU, el promedio vertido deberá estar en torno a los 700 metros cúbicos de agua por segundo (m³/s). Todo dependerá de la cantidad de energía que demanden a ITAIPU los sistemas interconectados paraguayo y brasileño, respectivamente.
Incluso, si la demanda energética de la usina aumenta, el vertedero se puede cerrar en cualquier momento, refieren los técnicos.
Cabe resaltar que el pasado jueves 16, la ITAIPU alcanzó su mayor producción diaria del año con 282.781 MWh, con 11.783 MW de promedio.
En cuanto a la situación hidrológica observada para los próximos días, la tendencia para este viernes 17 de noviembre es estabilizar entre las cotas 112 y 111 en la Estación Puente de la Amistad. Luego, a partir de mañana sábado 18, estaría oscilando alrededor de las cotas 111 y 110 metros sobre el nivel del mar e ir descendiendo gradualmente en los próximos días, acompañando el descenso del río Iguazú, que sigue con caudales altos y que, según el pronóstico de lluvias, para la semana que viene se tendría un posible nuevo evento meteorológico significativo entre el jueves y viernes.
Asistencia de Itaipú
Cabe resaltar que ITAIPU mantiene activo el Comité Especial de Crecidas (CEC), un grupo de trabajo formado por diferentes dependencias para brindar asistencia y transmitir toda la información sobre la situación actual del nivel de los ríos Iguazú y Paraná, especialmente en las regiones más afectadas por las inundaciones como consecuencia de las lluvias caídas en las últimas semanas.
Actualmente, algunas familias permanecen alojadas en albergues mantenidos por ITAIPU en el lado paraguayo. Se aconseja a estos grupos de damnificados que no regresen a sus hogares hasta que el nivel del río alcance sus valores normales.