La doctora Sandra Irala, directora interina de Vigilancia de la Salud, dio a conocer sobre el crecimiento de la curva epidémica y advirtió que en nuestro país ya estamos viendo el nacimiento de la tercera ola de contagios, que golpea principalmente a personas no inmunizadas.
Señaló que en el país se registra aumento de casos en las últimas cuatro semanas:
De los 461.912 casos acumulados de COVID-19, 630 corresponden a noviembre. El mayor número de casos (52%) son personas no vacunadas.
“La vacunación es la estrategia que puede llegar a controlar esta pandemia y debe darse de manera uniforme a nivel mundial”, manifestó Irala mientras aclaraba que si bien la vacuna anti COVID no impide la infección en un 100%, si protege de contraer las formas graves de la enfermedad, y reducir las probabilidades de hospitalización y muerte. “Si tenemos una población vacunada en más del 80%, se logrará reducir el número de casos”, agregó.
Alto Paraná: epicentro del rebrote de casos
Desde Salud mencionaron que actualmente el epicentro del rebrote de casos se encuentra en el departamento de Alto Paraná, una situación similar a la acontecida durante el pasado año. El incremento registrado en esta zona del país es de 7 semanas. “Los aumentos son importantes, van de 40 a 80% entre una semana y otra”, informó la médica.
Recordó que 300 casos por semana es el promedio de infectados que se verifica a nivel país, y solo en esta semana 109 fueron de Alto Paraná.
Cabe destacar que la cobertura de vacunación en Alto Paraná hasta el 15 de noviembre en personas de 12 años y más es de 60,27 % en primera dosis (327.802 personas) y 43% en segunda dosis (235.398 personas).
Hay distritos con muy baja cobertura por rechazo como Itakyry que llega solo al 32% de población vacunada, por otro lado, existen otros municipios como Naranjal y Santa Fe del Paraná que tienen el total de la población objetivo con las dosis correspondientes.
En las últimas 8 semanas se contabiliza un total de 83 fallecidos, de los cuales el 82% de los fallecidos no estaban vacunados. “Con la vacuna queremos lograr que esta cifra disminuya”, puntualizó Irala. El mayor porcentaje de muertes por COVID-19 se observa actualmente en Alto Paraná, Caaguazú e Itapúa.
Con respecto a los vacunados fallecidos, la titular de Vigilancia de la Salud explicó que la característica es que la media de edad es de 77 años. Indicó que en las últimas se contabilizaron 34 fallecidos, de los cuales 6 contaban con vacuna, pero todas pertenecían al rango de edad mayor de 60 años.
Explicó que esto ocurre porque la respuesta inmunitaria en esta franja poblacional es menor, por lo que se recomienda la aplicación de una tercera dosis para incrementar la defensa contra el virus pandémico.
Desde Salud alientan a vacunarse lo antes posible para lograr la inmunidad que se logra luego de 15 días de aplicación de la dosis. “No hay que esperar a que la ola llegue a la cúspide para decidir vacunarse, porque allí la sensación de riesgo es mayor” afirmó.