Bruno Meskin, presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes del Alto Paraná (ASOBARES) analiza el desafío de reabrir las puertas luego de meses de cuarentena y puente cerrado.
El empresario comentó que para los que abrieron, el repunte fue favorable en estos primeros 20 días, aunque se encontraron con varios obstáculos como el capital de inicio de actividades, los costos extras de salubridad y el límite en el horario de trabajo. “Si bien ya es hasta las 00:00 muchos realmente recién inician el laburo a esa hora”, agregó.
Meskin declaró que el 70% de los miembros de la asociación ya volvió a la actividad comercial y recordó que aún luchan por varias reivindicaciones, producto de la actual crisis. “Aún aguardamos un soporte económico por parte del Gobierno Central, la exoneración de cuentas de luz, el agua, aporte de IPS, y de parte de la municipalidades una serie de descuentos en las patentes e impuestos por los meses no trabajados”, detalló.
Esto había pasado durante la cuarentena estricta: La Pandemia golpeó fuerte en el Este: 70% de los bares y restaurantes en incertidumbre total
El protocolo
Todos los locales gastronómicos están habilitados para recibir clientes en sus instalaciones con la condición de cumplir el protocolo sanitario establecido para el sector por parte del Ministerio de Salud.
A grandes rasgos el reglamento sanitario exige un distanciamiento de 2 metros entre mesa y mesa, además de la separación de 1 metro entre persona y persona. También, todo el personal del restaurante deberá utilizar tapabocas y se deberá cumplir con el lavado de manos.
Además todos los locales deben tener a disposición de la clientela alcohol en gel y en cada mesa solo podrán sentarse 6 personas.