Esta idea de este conversatorio surgió entre los estudiantes en una clase una clase de Relaciones Humanas y Públicas, dictada por la Lic. Stela Marys Morínigo. “Queríamos hacer una actividad que tenga relevancia y que nos ayude a concluir parte de lo que estábamos desarrollando este año con la cátedra. Entonces surgió el proyecto de ley que nos pareció interesante porque ayuda a visibilizar un problema que quizá no estábamos percibiendo y que ahora se hace público”, comentó Analía Machuca, delegada del cuarto año de la carrera de Ciencias Políticas.
Invitamos como panelistas a la senadora Esperanza Martínez, principal proyectista y presidenta de la Comisión de Equidad de Género de la Cámara de Senado. También participará la senadora Claudia Gieco de la Provincia de Entre Ríos, quien compartirá su experiencia como legisladora de Argentina. Además, estarán las candidatas a concejales de Ciudad del Este Alison Anisimoff y Liz Acosta, como mujeres locales con carrera política para comentar su experiencia. Finalmente, estará la abogada Myriam Ferreira, quien fue concejal de Asunción durante el periodo 2010-2014 y es hermana de la diputada Olga Ferreira.
“Esta actividad tiene el objetivo de poner sobre el tapete un tema del que poco se conversa y sobre todo conocer la posición de estas mujeres, a través de la senadora Esperanza saber el objetivo y el alcance de este proyecto de ley y la visión de cada una. Sabemos que la política no es fácil, quizá siendo mujeres existen obstáculos mayores que no se suelen ver o quizá no es tan tormentoso como una se imagina. Hoy día la política no es sólo para hombres y hay mujeres que han logrado llegar a altos cargos”, expresó la estudiante y una de las organizadoras del conversatorio.
Finalmente, consultada sobre su opinión sobre la violencia política hacia las mujeres, la estudiante respondió: “A modo personal diría que la violencia pasa por una cuestión abstracta de una sociedad que no reconoce el papel de la mujer en la política y los desafíos de conjugar todos los roles de ser madre, esposa, trabajadora y política. Quizá culturalmente la sociedad machista no permite que haya un despliegue en el mismo nivel que el hombre lo hace”.