El Urbano recopila para vos una lista de qué hacer y qué no para disfrutar de un verano libre de molestos insectos:
Mantener la limpieza
El primer consejo, por supuesto, tiene que ver con mantener la limpieza en las casas. Esto incluye los desechos que se generan en la vida doméstica y de los árboles frutales, como el mango, que pueden atraer moscas.
Acerca del agua estancada
La limpieza también combate los mosquitos, pero un lugar que está aparentemente limpio también podría albergar recipientes con agua estancada que pueden volverse criaderos de mosquitos. Nunca es muy gastado recomendar un control estricto de los lugares en los que sea posible que se acumule agua, ya sea dentro de la casa como fuera de ella.
Ventilación de los espacios
Ventilar las habitaciones de la casa es una forma de mantener la humedad bajo control, que puede generar moho y atraer escarabajos y otros bichos. Es algo tan sencillo como abrir puertas y ventanas durante el día, dejando que el aire circule y entre la luz del sol. Hay que tener cuidado de hacerlo solamente en horarios más cálidos y luminosos, porque a medida que oscurece, los insectos intentarán entrar en la casa a buscar refugio, atraídos por la luz artificial del interior.
Instalar mallas en las ventanas
Por la noche es cuando más insectos intentarán colarse a nuestra casa, lo que podrían hacer a través de agujeros y huecos de las ventanas, las puertas e incluso del techo. Utilizar mallas metálicas en las puertas y ventanas, así como tapar de las grietas y rincones de la casa en las que pueden anidar insectos como cucarachas, hormigas, arañas y hasta reptiles pequeños, es una gran forma de mantenerlos a raya.
Proteger alimentos
Es muy, muy importante mantener cerrados recipientes que contienen alimentos, como bandejas y bolsas de pan, cajas de cereales y otros similares, ya que estos pueden atraer a cucarachas, moscas, hormigas, abejas y hasta los indeseables ratones.
Cuidado del jardín
Muchos jardines son también el escenario óptimo para que aniden diversos tipos de insectos que pueden llegar a ser muy molestos para los humanos. Es fundamental cuidar la limpieza del suelo, así como el largor del pasto y el espesor del follaje de las plantas, entre los que se pueden refugiar los bichos pequeños. También es en el jardín en donde se pueden alojar animales pequeños, como sapos y lagartijas, que son depredadores naturales de insectos. No son dañinos para el ser humano, por lo que no se sugiere eliminarlos del hogar.
Es necesario, además, entender que la destrucción de su hábitat es la principal causa por la que los insectos, entre ellos los odiados mosquitos, buscan ahora alojamiento en las zonas urbanas. La deforestación, entonces, se trata de uno de los puntos fundamentales en el aumento de las plagas en la ciudad, pero también del insoportable calor veraniego, porque son una de las principales causas del cambio climático.
En Paraguay, el verano da las condiciones óptimas para la proliferación de los bichos, debido a las lluvias y el aumento de las temperaturas, esto, sumado a al gran daño forestal que se vivió en el año, constituye la fórmula perfecta para el aumento de los insectos. Si vas a estar en exteriores, lo más recomendable es que uses repelente para evitar picaduras que pueden acarrear desde molestias hasta enfermedades transmitidas por vectores, como el dengue.