“El desarrollo fundamental de cada grado es para el logro de las competencias del ciclo correspondiente, por lo cual cada estudiante se desarrolla de forma a que los resultados son obtenidos por medio de evaluaciones para que de esa manera se pueda conocer el nivel de aprendizaje”, explicó Eligio Martínez, director departamental de Educación.
El representante regional del MEC además aseguró que esta decisión no representa un retraso en el proceso de aprendizaje de enseñanza en los estudiantes afectados. “No se puede hablar de retroceso, en este momento nos estamos abocando a la retroalimentación del contenido para luego realizar los exámenes, algo se aprendió y mientras sea así no existe retroceso”, aseveró.
Docentes de Alto Paraná con opiniones dispares
Hugo Benítez Vázquez, Presidente de la Asociación de Educadores del Este (AEDE) discordó con lo dicho por la autoridad local. “De hecho, causa mucho daño al aprendizaje de los alumnos, por múltiples factores”, expresó.
Además el sindicalista dijo que todo el tiempo invertido este año puede perderse tras una decisión como esta. “La consecuencia directa es que el niño no estará preparado para el siguiente año y así avanzar en el proceso anual de aprendizaje”, lamentó.
Por su parte, Ana Ramos, pedagoga especializada en Neuropedagogía de la Educación y psicóloga especializada en Neuropsicología Infantil y Neuroeducación, analiza la decisión del MEC considerando la pandemia.
“Depende del punto de vista. Si hablamos netamente del contenido programático, es probable que no se logre todas las habilidades deseadas por el MEC. Sin embargo, todo proceso de enseñanza y aprendizaje, para ser funcional, debe estar sujeto a las particularidades del tiempo y del lugar donde se desarrolla. Por esa razón, las habilidades que los alumnos necesitan adquirir durante la pandemia, son totalmente diferentes a las que proporciona el material didáctico que estuvo siendo utilizado y con el cual se los está evaluando y en algunos casos, reprobando”, aclaró.
Aprender sobre la marcha y con recursos limitados
La experta indicó que las reprobaciones no significan que el estudiante sea incapaz. “Las reprobaciones, en este caso, no necesariamente se deben a la incapacidad del niño. El programa que desarrollan fue creado para ser impartido con otra metodología, que no es la virtual. Así también los alumnos y los maestros no tuvieron oportunidad de ser suficientemente capacitados para la nueva metodología, sino que la gran mayoría tuvo que aprender sobre la marcha y con recursos limitados”, opinó.
Ramos recordó que prácticamente nadie se encontraba preparado para vivir una pandemia en el sector educativo por lo que se debe valorar lo aprendido como experiencia. “Por esos y otros motivos, la reprobación del alumno no necesariamente refleja su propia falencia. Es más bien resultado de la situación en que estamos viviendo y el hecho de que pasen de grado, aún con materias reprobadas, debe ser visto desde la resiliencia. Como una medida para avanzar juntos, evitando desmoralizaciones innecesarias. Mientras se reorganiza el sistema educativo para que cumpla su función, que es dar respuestas asertivas y preparar a los niños para afrontar la realidad actual”, reflexionó.
“Los niños son seres que aprenden naturalmente, por observación de su entorno. Aunque sean reprobados en las asignaturas propuestas por el MEC, y eso signifique un retroceso del sistema antiguo, cada vez más desfasado… De todos modos ellos siguen avanzando en el aprendizaje funcional de todas las habilidades que realmente necesitan para crecer y desarrollarse en la nueva normalidad que estamos viviendo. Ahora hace falta que nosotros, los educadores, apuremos el paso y nos pongamos al día para lograr acompañarlos”, concluyó.